La XXX Jornada Mundial del Enfermo anima a «ser portadores de esperanza y acompañar en el sufrimiento» como respuesta cristiana a la pandemia
La Diócesis recupera actividades para la ‘Campaña del Enfermo 2022’, que se abre mañana viernes día 11 en la fiesta de Ntra. Sra. de Lourdes y que tendrá la primera cita el sábado día 12 a las 17:30 en la Parroquia de Santa Marina
León, 10 de febrero de 2022
La Diócesis de León se sumará mañana viernes día 11, coincidiendo con la Fiesta de Nuestra Señora de Lourdes, a la XXX Jornada Mundial del Enfermo que, con el lema “Acompañar en el sufrimiento”, abre los actos de la ‘Campaña del Enfermo 2022’ con un programa que se va a desarrollar hasta el próximo día 22 de mayo, cuando se clausurará con la celebración de la Pascua del Enfermo. Tras la suspensión de todas las actividades presenciales el año pasado a causa de las restricciones de la pandemia, este año se han recuperado los actos que tendrán su primera cita destacada este próximo sábado día 12 a las 17:30 horas en la Parroquia de Santa Marina la Real con la eucaristía especial que va a presidir el obispo de León, el padre Luis Ángel de las Heras.
TRIDUO, ENCUENTRO INTERDIOCESANO, PEREGRINACIÓN
Ya para la próxima semana se ha programado la celebración del triduo al Ntra. Sra. de Lourdes que organiza la Hospitalidad de Ntra. Sra. de Lourdes en León y que se prolongará al domingo día 20 con la simbólica procesión de antorchas por el centro de León para concluir con una eucaristía en la Catedral. Además, el próximo mes de marzo, entre los días 14 al 16 la Diócesis de León acogerá el XLI Encuentro Interdiocesano de Pastoral de la Salud, suspendido el año pasado por causa de la pandemia, y ya en mayo se está trabajando en la organización de la peregrinación diocesana con enfermos a Lourdes, que desde el año 1971 se ha desarrollado de manera ininterrumpida hasta que en 2020 quedaba suspendida, situación que también se repitió el año pasado por causa de la pandemia.
Con todas estas iniciativas, enmarcadas en la ‘Campaña del Enfermo 2022’ que comienza mañana, el equipo de Pastoral de la Salud de la Diócesis quiere subrayar que “el Papa Francisco en su mensaje para esta XXX Jornada mundial nos invita a recordar a los numerosos enfermos que, durante este tiempo de pandemia, han vivido en soledad la enfermedad, incluso sus últimos días de vida, en sus casas, residencias u hospitales, lejos de sus seres queridos y de las personas más importantes de su vida terrenal”. En este contexto marcado por la pandemia, según el coordinador del equipo diocesano de Pastoral de la Salud, Fernando Escalante, “esta Campaña que ahora comienza pretende que seamos portadores de esperanza para cuantos sufren por la enfermedad, sin olvidarnos de todas las personas que cuidan a los enfermos y de aquellos que padecen enfermedades menos ‘visualizadas’ y que provocan un gran sufrimiento: personas con enfermedad mental (la depresión es cada vez más frecuente y en edades más bajas, siendo el suicidio la segunda causa de muerte entre los jóvenes), enfermedades neurodegenerativas (Ela, alzheimer) o las llamadas enfermedades raras, para las que se destinas menos recursos y cuyos enfermos padecen una situación de mayor abandono”.
TRABAJO DE CAPELLANES Y CONTACTO TELEMÁTICO
Esta ‘Campaña del Enfermo 2022’, que este año recupera actividades tanto en modalidad telemática como presencial, pretende dinamizar la actividad del equipo de Pastoral de la Salud “para volver a colocar al paciente y al cuidador en el centro de nuestras atenciones, y estimular los encuentros cercanos y reuniones como se pueda ir haciendo, echando mano de las posibilidades de comunicación que ofrecen las nuevas tecnologías” según ha señalado el coordinador Fernando Escalante, al tiempo que se mantiene el trabajo con la presencia diaria de ocho capellanes en los centros hospitalarios de la Diócesis y con un contacto permanente a través de las vías telemáticas.
PRESENCIA PERMANENTE EN EL CAULE
Un buen ejemplo de este compromiso y trabajo desde la Pastoral de la Salud ha sido el del sacerdote Jesús Crespo, capellán coordinador del servicio religioso del Complejo Asistencial Universitario de León (CAULE), que asegura estar viviendo “con intensidad, con tensión, estos momentos en los que se ha reorganizado todo el trabajo para asegurar una presencia permanente en todos los lugares del complejo, en el Hospital Universitario, en el Monte San Isidro y en Santa Isabel, donde acudimos los sábados por la tarde para la celebración de la eucaristía, y nos hemos distribuido en dos circuitos, un capellán asiste el llamado ‘circuito Covid-sucio’ y otro en el ‘circuito limpio’, con todas las limitaciones que esto va trayendo y con tensión y cansancio psicológico que ya se viene arrastrando, por los enfermos en sí, por las familias…”. En medio de una situación excepcional marcada por la pandemia, como nunca en sus ya quince años de servicio como capellán en el Hospital había vivido, Jesús Crespo asegura que “el acompañamiento y la escucha a todos aquellos enfermos que solicitan nuestra presencia es bienvenida y muy agradecida por todos los pacientes que, además no pueden tener visitas de familiares”.