- La Diócesis se une a la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y Jornada de Vocaciones Nativas desde el lema ‘Deja tu huella, sé testigo’
- Se celebrará este domingo día 8, Domingo del Buen Pastor, y tendrá como prolegómenos mañana sábado día 7 a las 12 h. en la capilla del Seminario Mayor con el rito de institución de ministerios laicales y a las 20:30 h. en la Catedral con una vigilia de oración
La Diócesis se sumará este próximo domingo día 8, Domingo IV de Pascua, conocido como el “Domingo del Buen Pastor”, a la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y Jornada de Vocaciones Nativas desde el lema ‘Deja tu huella, sé testigo’ que también ha inspirado la carta pastoral que ha hecho pública el obispo, el padre Luis Ángel de las Heras, en la que subraya la importancia de “dejar una huella que ‘llene de vida’ la historia personal y la de otros” desde la “grandeza de ser llamados a protagonizar una vida familiar, ministerial o de especial consagración…”. Un mensaje para esta Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y Jornada de Vocaciones Nativas que enlaza con aquella iniciativa que se desarrollaba en toda la Iglesia de León en el curso 2017-2018 bajo el lema “Venid y Veréis”, Año Pastoral Diocesano Vocacional que tenía ya entonces el objetivo de responder a la “urgencia pastoral para que entre todos logremos una nueva y verdadera cultura vocacional”.
MINISTERIOS LAICALES Y VIGILIA DE ORACIÓN
Un Año Pastoral Diocesano Vocacional que ha seguido presente en la Diócesis con iniciativas de nueva evangelización como Cursos Alpha y que volverá a primer plano en todas las parroquias de León con la celebración de esta LIX Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones este domingo día 8 desde ese lema “Deja tu huella, sé testigo” y que tendrá como prolegómenos la celebración que acogerá mañana sábado día 7 a las 11 horas en la Capilla del Seminario Mayor con las institución de dos seminaristas en el ministerio de lectorado y de un aspirante al diaconado en el ministerio del acolitado, y ya por la tarde a las 20:30 horas en la Catedral en un vigilia de oración con participación de las tres delegaciones diocesanas.
INICIATIVAS EN EL ÁMBITO DE LA PASTORAL VOCACIONAL
El Área de Propuesta y discernimiento vocacional de la Delegación de Comunión Fraterna, el Área de Juventud, Universidad y Diálogo Fe-Cultura de la Delegación de Evangelización Misionera y el Área de Misiones y Cooperación con las Iglesias de la Delegación de Misión Samaritana, junto con los dos seminarios diocesanos, el Mayor “San Froilán” y el Redemptoris Mater “Virgen del Camino”, han promovido estos días la difusión de esta Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y Jornada por las Vocaciones Nativas con actos como la convivencia del grupo vocacional de Gente CE. Iniciativas específicas de trabajo en ese ámbito de pastoral vocacional que se desarrollan en la Diócesis de León, con los diez jóvenes que vienen participando regularmente en las actividades de los dos grupos vocacionales de acogida e iniciación, que pretenden ser caminos que conducen hacia el ingreso como seminaristas para los chicos o hacia el ámbito de la vida consagrada para las chicas. Estos grupos son “Gente CE”, para jóvenes de 11, 12, 13, 14 y 15 años (de ahí la denominación CE) y “Mar adentro”, para jóvenes de 16 a 18 años. Además, junto con el trabajo en estos grupos permanentes de convivencia que desarrollan su actividad a lo largo de todo el curso y que este año han recuperado los encuentros presenciales tas las limitaciones que ha impuesto la pandemia, la Diócesis de León organiza un ciclo especial de Encuentros de Monaguillos, que culmina con la celebración del “Día del Monaguillo”, para incentivar la vocación en aquellos niños que por su labor se pueden encontrar próximos a una llamada al sacerdocio o a la vida religiosa.
MENSAJE DEL OBISPO
Tanto en la vigilia de oración de mañana sábado, como en todas las eucaristías que este próximo domingo se celebrarán en las parroquias de toda la Diócesis se remarcará el significado del lema “Deja tu huella, sé testigo”, el obispo de León, el padre Luis Ángel de las Heras, comenta en su carta pastoral para esta Jornada al destaca la importancia de “dejar una huella que marque la propia historia y la de otros, algo que es consecuencia de la huella que deja Cristo en el corazón humano que le abre sus puertas. Él se queda para siempre, inundando las estancias de la existencia terrena de amor y de luz”.
El obispo de Léon afirma en su carta pastoral “qué gracia tan grande la de ser testigos de una vida que ha quedado transformada por la huella del Maestro y que es invitación a otros para que se encuentren con el Señor; qué huella más honda la de experimentar una vida en Dios que hace sonreir con los ojos del corazón”. Y concluye: “Qué huella más honda deja Cristo en el Señor y dejan los hombres y mujeres de Dios”.