II Jornada Mundial de los Abuelos y los Mayores

  • La Diócesis se suma a la II Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores con el lema «En la vejez seguirán dando fruto»
  • El obispo, el padre Luis Ángel de las Heras, presidirá una eucaristía especial este próximo domingo día 24 a las 11 horas en la Capilla de la Residencia Diocesana Juan Pablo II

La Diócesis de León se sumará este próximo domingo día 24 a la II Jornada Mundial de los Abuelos y Personas Mayores, convocada por el Papa Francisco con el lema “En la vejez seguirán dando fruto” en la cercanía de la fiesta de San Joaquín y Santa Ana del próximo día 26. Una convocatoria que tendrá como acto central la eucaristía con bendición especial para todos los abuelos y personas mayores de la Diócesis que presidirá el obispo, el padre Luis Ángel de las Heras, el domingo a las 11 horas en la Capilla de la Residencia diocesana Juan Pablo II (C / Víctor de los Ríos, 23 – Barrio El Ejido).

“ARTÍFICES DE LA REVOLUCIÓN DE LA TERNURA”

El lema elegido para esta II Jornada Mundial de los Abuelos y Personas Mayores, “En la vejez seguirán dando fruto” (Sal 92, 15), tomado del versículo del salmo 92 es, según el Papa Francisco “un verdadero ‘Evangelio’ que podemos anunciar el mundo con ocasión de esta segunda Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores”.

Un mensaje en el que incide el obispo Luis Ángel de las Heras en su última carta pastoral de este curso en la que, bajo el título ‘Caminamos juntos mayores y jóvenes’, señala que “la ancianidad, con todas sus dificultades de comprensión y vivencia, es una etapa hermosa de la vida que también invita a seguir esperando, porque el Señor continua dando vida y bendiciendo a quienes suman muchos años”. Y en esa línea el prelado legionense subruya que “con la gracia y bendición del Señor, cultivadas espiritualmente, se renueva la relación don Dios y con los demás para dar frutos de afecto y ternura, compañía y sabiduría, ayuda material e intercesion en la oración, protección y cuidado…frutos que harán de los abuelos y las personas mayores artífices de la «revolución de la ternura»”.

VISITAR A LOS ANCIANOS, OBRA DE MISERICORDIA

Desde esta perspectiva el pastor diocesano coincide con el Papa Francisco cuando asegura en su mensaje que “la Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores es una ocasión para decir una vez más, con alegría, que la Iglesia quiere festejar con aquellos a los que el Señor —como dice la Biblia— les ha concedido “una edad avanzada”. ¡Celebrémosla juntos! Los invito a anunciar esta Jornada en sus parroquias y comunidades, a ir a visitar a los ancianos que están más solos, en sus casas o en las residencias donde viven. Tratemos que nadie viva este día en soledad. Tener alguien a quien esperar puede cambiar el sentido de los días de quien ya no aguarda nada bueno del futuro; y de un primer encuentro puede nacer una nueva amistad. La visita a los ancianos que están solos es una obra de misericordia de nuestro tiempo”.

Y en esa línea el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida propone dos formas de participar en esta Jornada: celebrar una misa y visitar a mayores que viven solos. Además, la Penitenciaria Apostólica de la Santa Sede ha concedido indulgencia plenaria a todos los ancianos que participen en las liturgias celebradas con motive de esta II Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores, y también se concende esa indulgencia plenaria a todos aquellas personas que en los días inmediatamente anteriores o posteriores a este 24 de julio visiten a un anciano que esté solo.