José Román Flecha Andrés (Diario de León, 30-IV-2023)
El Instituto Pablo VI de Brescia ha creado un premio que lleva el nombre de Pablo VI, que, según los estatutos, ha de ser asignado a “personalidades que con su estudio y sus obras hayan contribuido al crecimiento del sentido religioso en el mundo”.
Al cumplirse sesenta años de la elección de Juan Bautista Montini al supremo pontificado, el Instituto ha elegido el lema “Pablo VI e Italia: la herencia histórica y la actualidad” y ha decidido conceder el premio al presidente de la república Italiana, Sergio Mattarella.
Según el profesor Angelo Maffeis, presidente del Instituto, con esta atribución del premio, se pretende subrayar el valor de la acción política cuando está al servicio del bien común en el ejercicio de las diversas funciones institucionales.
Como sacerdote y asistente eclesiástico de la FUCI, Juan Bautista Montini, en medio de un ambiente dominado por el régimen fascista, contribuyó a formar para la libertad a los jóvenes universitarios de Italia. Como Sustituto en la Secretaría de Estado del Vaticano, después de la segunda guerra mundial, pudo acompañar el crecimiento de la joven democracia italiana. Como arzobispo de Milán, conoció las profundas transformaciones culturales de la sociedad. Y como Papa siguió la situación italiana con un sincero respeto a la autonomía de la sociedad civil y con profundo dolor por los atentados terroristas.
El profesor Maffeis afirma que el espíritu con el que Montini calificaba la política se ve reflejado en una carta que dirigió a su padre, que el año 1924 dudaba si presentarse a las elecciones políticas. Su hijo lo anima a aceptar la candidatura y a asumir la responsabilidad que conlleva:
“Querido papá, valoro muy complacido el esfuerzo, como el tuyo, de quienes buscan motivos superiores de coherencia y de moralidad política para permanecer en el campo de la competición, en lugar de retirarse para criticar o para soñar […] Uno de los peligros más graves para un país es que de sus corrientes políticas tengan que apartarse los honestos, los honrados, los competentes. Permanecer es un acto de virtud ciudadana aun cuando se tenga que quedar como vencidos o derrotados […] ¿Llegará un día en que se entienda que la mejor polémica -la única beneficiosa y cristiana- para vencer debe convencer?”.
Para recordar y agradecer esa herencia de moral política, el papa Francisco entregará al presidente de Italia el premio internacional Pablo VI el día 29 de mayo, en el que se celebra la memoria litúrgica de San Pablo VI y pocos días después de conmemorar los sesenta años de la elección de Montini al supremo Pontificado.
Esta entrega pretende ser una invitación a la sinceridad y a la caridad política, a la que se refiere el papa Francisco en su encíclica Fratelli tutti.
